Las reacciones adversas medicamentosas justifican en la actualidad entre el 1% y el 2% de los ingresos hospitalarios y hasta el 20% de los pacientes hospitalizados van a sufrir una reacción adversa medicamentosa durante la internación.
En todas las casa mexicanas existe un rincón de la cocina o el baño en el que se van acumulando “medicinas” que, pensamos, volveremos a utilizar en algún momento. Si años después crees que puedes necesitar uno de estos fármacos, ¿es seguro tomarlos? Puede que sí, puede que no.
La Organización Mundial de la Salud define una Reacción Adversa a un Medicamento (RAM) “a cualquier manifestación clínica de laboratorio no deseada que ocurre después de la administración de uno o más medicamentos”.
El análisis de los riesgos y de la ocurrencia de los eventos adversos tienen sus antecedentes en estudios sobre efectos indeseables de los medicamentos, de las infecciones nosocomiales (enfermedades transmitidas dentro de un hospital que no estaban presentes en el momento de ingreso del paciente